Héctor Alonso López: El Rostro Humano de la Política

Por: Ramón Rivas

Profesor de la escuela de Historia de la Universidad de los Andes Mérida Venezuela

Hector Alonso López Formador de Juventudes

Tuve la oportunidad de leer por tercera vez el extraordinario libro de nuestro estimado amigo Héctor Alonso López: El Rostro Humano de la Política. Un libro excepcional, un testimonio, una vida, una trayectoria vital de un líder político, consustancial con la historia política de la Venezuela de los últimos treinta años del siglo XX. La expresión histórica, de una generación, que él lideró con un papel estelar en la constitución, el fortalecimiento y la consolidación del movimiento juvenil de Acción Democrática a lo largo y ancho del territorio nacional.  La Venezuela 2000, la más hermosa iniciativa política que picoteó el fervor juvenil de Acción Democrática por todo el país, contribuyendo con el triunfo del Candidato presidencial CAP en las elecciones presidenciales, realizadas en el mes de diciembre 1988. Su temple vital, su capacidad política y conexión con la geografía venezolana, lo convirtieron en un líder político nacional, ocupando cargos de importancia en el partido de A.D, en el poder Legislativo y en el primer gobierno de CAP (1974-1979). Al mismo tiempo, Héctor Alonso López, testigo excepcional de los acontecimientos nacionales e internacionales, que se gestaron entre 1966 y 1993. El líder estudiantil que se forjó en la ciudad de Mérida, hasta alcanzar su madurez política a lo largo de unas cuantas décadas en la cuidad de caracas. Sin duda alguna, parte vital en las dos gestiones de gobierno en la que Carlos Andrés Pérez fue su protagonista estelar en el rumbo que Venezuela tenía que tomar hacia una nueva perspectiva histórica. Un testigo que observó cómo y de qué manera la nación entró a una nueva fase de la historia de la Venezuela del siglo XX. Por esto, su libro de suma importancia para comprender su liderazgo político, la de su partido Acción Democrática y el rol de esa figura política en la conducción de la Venezuela moderna, como lo fue Carlos Andrés Pérez. Un testimonio propio que deja correr en más de 549 páginas en la que describe la génesis, el desarrollo, el fortalecimiento y la consolidación de su liderazgo político que remontó la cumbre andina hasta alcanzar en el horizonte la Caracas de los techos rojos. En el seno de su familia, honorable y noble familia, despertó en su ánima su vocación por la política y la educación.  Sus padres, el maestro Don Gustavo Amador López y Doña Hilda de López, inculcaron en el espíritu de Héctor Alonso López la formación moral que determina el temple, el carácter y el destino vital para el ejercicio de la política como el camino que hace posible la convivencia y el respeto mutuo.

Allí, en el alma de un niño, de un joven y de un adulto, su amor por la democracia y la civilidad. En el hogar, la moral y la política una mutua inmanente. Seguramente, en la escuela primaria, las primeras letras que despertaron en el alma de Héctor Alonso su preocupación por los problemas sociales. Seguramente. Obstante, fue en la secundaria, en Liceo Alberto Carnevalli en Mérida que se potenció su vocación política. La reacción natural contra el director de ese liceo, por su naturaleza autoritaria, prendió en Héctor Alonso la chispa por el quehacer político. Un joven estudiante, un verbo que animó el fervor de aquellos muchachos por las reivindicaciones estudiantiles, hasta conquistar el Centro de Estudiantes del Liceo Alberto Carnevalli. El comienzo de una carrera política que se prolongó a lo largo y ancho del país. El viaje a Caracas, el punto nodal para estudiar en el instituto Pedagógico de Caracas. Además, el encuentro vital con A.D., la escuela de su formación ideológica y el desarrollo como militante en aquella cuidad, centro de la política nacional. Una experiencia vital, un aprendizaje, una pedagogía para el ejercicio de la política. Allí, en ese escenario conoció a su maestro y a su entrañable amigo líder político Carlos Andrés Pérez. Se estableció una relación vital, de dos políticos, dos auténticos amigos, de respeto y admiración, que estuvo marcado por el más profundo sentimiento de gratitud. Una relación vital poco común en la fauna política de un país, como Venezuela, lleno de odio, de resentimientos, de frustraciones, de deslealtades y de traiciones. El libro recoge en sus capítulos la riqueza política y espiritual de estos entrañables amigos y políticos que actuaron y vivieron en el acontecer de la política nacional e internacional. Experiencias y anécdotas que resalta la grandeza humana de Carlos Andrés Pérez y Héctor Alonso López. Las palabras que pronunciara Héctor Alonso López, en la despedida de CAP, en Miami, fueron conmovedoras: Un amigo que despide con gratitud a la gran figura histórica de CAP, denota en Héctor Alonso López su entereza moral y espiritual hacia su líder político y amigo Unas palabras que destaca cuán importante fue Carlos Andrés Pérez para la transformación y la modernización de la Venezuela de los últimos treinta años del siglo pasado. Gratitud y grandeza política y humana de estos dos extraordinarios amigos que revela el libro La Política con Rostro Humano.

El libro la Política con Rostro Humano que denota en todas esas páginas historias, experiencias, testimonios y anécdotas sobre la vida de un líder político como Héctor Alonso López, figura vital del partido de A.D., parte esencial de los últimos acontecimientos de la política nacional e internacional, fundador de la Venezuela 2000 y de la Universidad Popular Alberto Carnevalli. Esta obra tiene un trasfondo moral extraordinario: una profunda gratitud hacia la vida, hacia sus padres, hacia sus hermanos, hacia sus amigos y políticos, hacia el gran amor su esposa, hacia su bella y hermosa hija y nieta. La gratitud en Héctor Alonso López, un sentimiento gigantesco e infinito. Un hombre inteligente, sereno y con un espíritu conciliador, heredero de todo cuando pudo aprender en la vida. Sigue aprendiendo. La gratitud un valor poco común en la especie humana. Héctor Alonso López, un ser humano único en este mundo político de tanta ingratitud y deslealtades. El testimonio que deja Héctor Alonso López sobre Encarnación Rivas, es una muestra de lo que significa su libro la Política con Rostro Humano. Un hombre de una lealtad, de una responsabilidad, de respeto, de admiración en todos los Acción Democratitas. Inteligente, de buen humor, con sentido común y un hombre de las oportunidades. Un hombre humilde y modesto, con un alma extraordinaria. En esas páginas que describe la personalidad de Encarnación Rivas, son conmovedoras. Encarnación Rivas un testimonio excepcional sobre A.D. y la vida política nacional.

Hay muchas cosas interesantes en el libro de Héctor Alonso López, que nos permiten generar reflexiones sobre el origen y la decadencia histórica de Acción Democrática. Sin embargo, No dejó de pensar sobre el futuro de Acción Democrática y de la nación con una mirada histórica más allá del pasado. Por ejemplo, El capítulo XVIII “La Nueva Democracia” abre una página, una reflexión política y filosófica en torno a una nueva manera de ejercer el poder, las organizaciones políticas y sociales desde una perspectiva de democracia de ciudadanos. Un tema de importancia vital en estos tiempos de complejidad e incertidumbre.

Al final del día, sus dos coronas históricas que perdurarán en el tiempo como su gran legado político de la Venezuela del siglo XX: La creación de la Universidad Popular Alberto Carnevalli (noviembre, 1986) y la Venezuela 2000. Hoy, una empresa política de envergadura histórica, bajo su coordinación, como es la celebración del Centenario de Carlos Andrés Pérez. Un reto mayor en la que tendrá el mayor éxito posible. No tengo la menor duda.

En fin, el libro de Héctor Alonso López El Rostro Humano de la política, un libro de 549 páginas, con XVIII Capítulos, con un hermosísimo discurso que improvisó en la despedida a CAP, en Mami, el 28 de diciembre del 2010, revela el fundamento último que hace grande a los seres humanos: su gratitud ante la vida, ante su familia, ante sus amigos y amigas, ante su Partido Político A.D. Un heredero de todo cuanto pudo aprender de la vida familiar, de la vida humana y de la vida política. No es casual que el libro lo dedica a sus padres y a su familia. Bienvenido un libro de tanto testimonio, experiencias, de anécdotas sobre el quehacer de la política, de un líder, de un hombre, que tiene en el ánima el más bello sentimiento de la existencia humana como es el sentimiento de la gratitud. Decía Don José Ortega y Gasset, que “El defecto más grave del hombre es la ingratitud. El ingrato olvida que la mayor parte de lo que tiene no es obra suya, sino que le viene regalado de otros, los cuales se esforzaron en crearlo u obtenerlo”

Pues, bien, el libro de Héctor Alonso López un libro que destaca el reconocimiento de su hechura política como parte vital de la herencia familiar, de la herencia política y la herencia que marcó y sigue marcando en su ánima la obra histórica que dejó Carlos Andrés Pérez en la Venezuela del siglo XX. Un libro que resalta la gratitud como el valor moral que enaltece la dignidad de la existencia humana.