El sindicalismo venezolano debe recuperar su autonomía

 Fetra-Mérida inició el año con la institucionalización del Día del Trabajador Merideño

Con una misa de Acción de Gracias y una ofrenda floral a El Libertador, Simón Bolívar, se ha institucionalizado a partir de este año 2023, cada 8 de enero, el Día del Trabajador Merideño, iniciativa que parte de la nueva directiva de la Federación de los Trabajadores del estado bolivariano de Mérida (Fetra-Mérida), que reactivada desde el mes de noviembre del pasado año ha emprendido la labor titánica de rescatar la autonomía sindical en el estado.

La eucaristía fue celebrada en la Basílica Menor Inmaculada Concepción, Catedral de Mérida, donde también se hicieron presentes los directivos de la Central Unitaria de los Trabajadores de la Educación (Q-TEEM) y el Sindicato Autónomo Magisterial del estado Mérida (Sindi-Samem), encabezados por Miguel Villamizar, quienes trabajan de la mano con Fetra-Mérida y respaldan la propuesta que se consolidó este domingo.

Rómulo Morales, presidente de Fetra-Mérida, se mostró complacido por el avance que en tres meses ha logrado la federación en las labores emprendidas para el rescate de la acción sindical y su lucha por las reivindicaciones de los trabajadores de todos los sectores del estado.

Culminada la misa, las autoridades junto a algunos allegados a la federación, realizaron la ofrenda floral al padre de la patria, Simón Bolívar.

Un terreno abonado

El Orador de Orden fue el cronista merideño, nativo de los Pueblos del Sur, Ramón Sosa Pérez, quien hizo un recorrido  histórico de la lucha sindical en Mérida, rememorando a hombres de gran valía que en el siglo pasado abonaron el camino en defensa de la masa trabajadora, destacando particularmente a don Bernardo Aranguren.

De Aranguren destacó su temple, dignidad, entrega y pasión, condiciones de probidad que pocas ocasiones se reúnen en una sola persona y guarda con fidelidad ese perfil dirigencial tan nuestro como la Sierra Nevada, legado que se debe asegurar en el devenir de los tiempos, expresó en su discurso que acaparó la atención de los presentes.

En ese mismo reconocimiento, recalcó el trabajo que se ha hecho en el campo desde hace más de dos décadas, con los sindicatos campesinos, cuyo germen combativo está representado en Carlos Pernía, que pervive en el espíritu libertario de sus fundadores y quien hoy forma parte de Fetra-Mérida como secretario de Organización.

Carlos Pernía -registró Sosa en su discurso- ha sido un fiel representante de la lucha campesina juvenil del estado Mérida desde los años finales de los 80 y principio de los 90, en El Peñón, su tierra de origen, lugar de referencia obligada para los trabajadores organizados del campo en Mérida y el Valle del Mocotíes.

Recuperar la autonomía

En sus palabras de cierre, el cronista de Mérida dijo estar convencido que el sindicalismo es una ventana de lucha que debe recobrar su autonomía, esa misma que permitió en sus primeros tiempos consolidar la credibilidad, basada en el respeto por el pluralismo y en la lucha auténtica por los derechos de los trabajadores, con ello el compromiso con la masa trabajadora merideña habrá ganado un nuevo espacio de esperanza y se reivindicará con justicia.

Abogó por el remozamiento de un liderazgo sindical que interprete los signos de los tiempos más cercanos a la interlocución de los sectores y al estudio de una realidad que plantee al trabajador de cara a una nueva perspectiva. ( Prensa Fetra-Mérida/WM)