En caso de que la sentencia dictada a Cristina Kirchner este 6 de diciembre quede firme, ella perdería la jubilación, la pensión que cobra actualmente, la administración de sus bienes y no podría votar ni ser votada
Este martes, 6 de diciembre, Cristina Fernández de Kirchner fue condenada a seis años de prisión por irregularidades en la concesión de obras viales durante los Gobiernos kirchneristas (2003-2015). Como parte de su condena, también fue inhabilitada perpetuamente para ejercer cargos públicos por la causa Vialidad.
Además, el Tribunal Oral Federal 2 también ordenó decomisar los efectos del delito, lo que sería una suma de 84.835 millones de pesos (equivalente a 482 millones de dólares).
En claves te explicamos qué procede luego de la condena a Cristina Kirchner y si puede ser candidata presidencial en 2023:
Actualmente Kirchner es la vicepresidenta de Argentina, por lo que tiene inmunidad a su condena hasta diciembre de 2023, cuando termina su gestión para la que fue electa en formula con Alberto Fernández. Sin embargo, esta condena podrá comenzar a cumplirse cuando pase por dos instancias judiciales más y sea firme. Primero por la Cámara Federal de Casación Penal y luego por la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
La condena de prisión puede ser domiciliaria, puesto que Cristina Kirchner, de casi 70 años, cumple con la edad que establece la ley argentina para solicitar el arresto domiciliario, aunque esto no es automático.
Esta sentencia no afecta una posible postulación de Cristina para el año 2023, debido a que cuenta con el antecedente del expresidente Carlos Menem, quien para las elecciones de 2017 tenía una condena por la venta de armas a Croacia y Ecuador y la Corte Suprema avaló que fuese a elecciones porque la condena no era firme, indica un trabajo publicada por el portal Infobae. Por esta razón, se debe esperar la decisión de la Cámara Federal de Casación Penal y la Corte Suprema de Justicia de la Nación
En caso de que la sentencia de Fernández de Kirchner quede firme en las dos próximas instancias, ella perdería la jubilación, la pensión que cobra actualmente, la administración de sus bienes y el derecho a votar y ser elegida. Ya en declaraciones, luego de conocerse a decisión, Fernandez ha manifestado que no aspira ser candidata a nada.
Algunos analistas apuntan a la agencia de noticias EFE que, por la impopularidad del Gobierno peronista debido a las dificultades económicas que arrastra Argentina, la expresidenta no se postulará a la elecciones de 2023 sino que se conformaría con ser senadora, cargo que no le sería difícil de conseguir y le permitiría blindarse ante una detención.
En una transmisión en vivo este mismo 6 de diciembre, Cristina aseguró que con su inhabilitación también «se condena un modelo de desarrollo económico» y que no se lanzaría como candidata presidencial el próximo año.
«No voy a someter a la fuerza política que me dio el honor de ser dos veces presidenta y una vicepresidenta a que la maltraten en período electoral con una ‘candidata condenada’, con ‘inhabilitación perpetua’, con ‘administración fraudulenta por el estado’ (…) Bueno, no voy a ser candidata (…) no va a ser candidata a nada», aseveró al decir que su nombre no va a estar en ninguna boleta. Fuente: El Pitazo/ Infobae y EFE